Una situación que se ha establecido en la última época de forma progresiva, ha sido la de que los abuelos se han convertido en pseudo-cuidadores de sus nietos muchas horas al día. El hecho de que muchos de ellos ya se encuentren jubilados y que la esperanza de vida sea cada vez mayor, junto a la incorporación masiva y generalizada de la mujer al mercado laboral, favorecen que su papel en el cuidado de los nietos haya tenido más protagonismo que en época anteriores.
Esta situación, creo que favorece la aparición de los conflictos de origen ya que tanto la configuración de roles como la configuración del núcleo familiar incidirán directamente en la formación del constructo social del niño/a.